Por. - César Adrián Castro Aguilar.  

Para el partido revolucionario institucional en el estado, vienen tiempos cruciales en los cuales, se verá obligado a cerrar filas con las nuevas dirigencias sectoriales y enmendar errores del pasado que los llevó a perder la presidencia de la república y sufrir severos golpes electorales que fueron minando sus fortalezas. 

La primera aduana de la militancia ha sido el cambio de dirigentes de sectores y organizaciones, para lo cual hubo registro único en el Onmpri Dgo, Gaby Hernández; CNC con Jose Angel Beltran Felix; CNOP Ariel Maa Lopez; Oscar Velásquez y Francisco Ibarra Jacquez en Unidad Revolucionaria, además de los 39 comités municipales del PRI. 

La actitud aferrada de algunos miembros del partido que han sido beneficiados en cargos públicos y de elección popular que no quieren soltar prenda, puede abrir de nuevo un boquete en un PRI que quiere resurgir y que pueda cimbrar sus estructuras, acrecentando el clima de rivalidad y encono entre miembros del mismo partido.  

Muchos militantes acusan de cerrazón a ese grupo de connotados priistas que pone en evidencia la doble moral de los vivillos que siempre se sirven con la cuchara grande y reanima los motivos de las disputas entre miembros del PRI y que quieren vender la idea que fueron puntales para el triunfo de su coalición para la gubernatura.

¡nada tan falso como eso! 

No olvidemos que el triunfo de Esteban Villegas Villarreal se debió en gran medida al arrastre del propio gobernador, que logró penetrar en los grandes núcleos de la sociedad civil dejando de lado la soberbia, que fue lo que en realidad le dio el triunfo de manera apabullante al mandatario, prueba de ello es que en la actualidad lo acompañan en su gabinete personajes que fueron vistos en otras latitudes partidarias ante la cerrazón de los dirigentes priistas del estado. 

Con pelos y señales, nos han filtrado datos duros que explican como en el reparto de posiciones políticas de privilegio al interior del tricolor, siempre son los mismos beneficiarios.  

Esta filtración demuestra las pugnas entre la elite partidista, cuyas repercusiones en el estado se han hacen evidentes.  

De inmediato el escenario de rivalidades hace eco en el CEN, y con un estate quieto, el dirigente nacional Alito Moreno, acudió a Durango para desmarcarse a tiempo de una posible vinculación con los presuntos culpables de tales jugadas políticas.  

Al actual dirigente en el estado Arturo Yáñez Cuellar se le llegó el tiempo de entregar la batuta del partido, pero el finge demencia en tanto no negocie para sí mismo otra posición que le garantice estar activo en el escenario publico político donde la ha hecho de más o menos para atrás. 

A pesar de la autopromoción de muchos personajes muy conocidos para competir por las propuestas priistas (dentro de la coalición Va por México) el 2024, falta mucho camino por recorrer.  

La clave será hasta que se defina la circunstancia de la coalición,  

El otro ingrediente, será también la posición del PAN, quienes sabedores de esta circunstancia, se ha mantenido distante midiendo los tiempos que guarde el proceso preelectoral.  

¿Qué pasara?  

#LaHistoriaSigue  

Mentas y mentadas. - una_299@hotmail.com