Un cierre de la Administración supondría la congelación de los sueldos de los trabajadores del Estado.

En la última semana del mes, los miembros del Congreso se han reunido para llegar a un acuerdo y evitar el cierre del Gobierno.

Los miembros de la Cámara de Representantes deben ponerse de acuerdo para implementar un plan de financiación del Gobierno antes del día 30 de septiembre.

Las profundas divisiones sobre el gasto entre los dos partidos y desacuerdos políticos sobre cuestiones como la ayuda a Ucrania impiden llevar a cabo el plan de financiación.

Este fin de semana, varios miembros del partido republicano, aliados del presidente de la Cámara Baja, Kenin McCarthy; pidieron a sus socios que dejaran las tácticas de línea dura y colaboraran para un plan de gasto.

El presidente Joe Biden achaca la culpa a los republicanos extremistas y alerta de que en caso de cierre los sueldos de los trabajadores del estado y varios servicios públicos ser verían congelados.

“Si el Gobierno cierra, eso significa que los miembros del ejército estadounidense tendrán que seguir trabajando y no cobrar”, dijo Biden durante una cena de la Fundación del Caucus Negro del Congreso. Este señaló que un cierre del Gobierno afectaría programas de investigación para la cura de enfermedades financiadas por el Estado.